Los terceros molares incluidos también pueden ser causa de dolores faciales intensos por su vecindad con los nervios que trasmiten la señal de sensibilidad del maxilar inferior.
Muchas veces, las cordales no erupcionadas pueden producir acumulación de bacterias e infecciones y además pueden producir lesiones de dientes sanos adyacentes y dolor intenso.
Cuando no erupcionan las cordales, algunas personas pueden pensar que esto es normal y no preocuparse. Sin embargo estos dientes no erupcionados pueden dar origen a abscesos, quistes o tumores que si no son identificados a tiempo pueden producir estados de mayor gravedad.